miércoles, 9 de diciembre de 2009

Si hay que decidir entre jugar bien o ganar....



¿Jugar bien o ganar?



Por: Juan Diego Rey



Esta quizás es la pregunta que más aficionados se hacen. ¿Qué es más importante para un equipo? ¿Obtener resultados positivos, títulos y campeonatos, o demostrar un juego que agrade a la vista? La respuesta es: los dos. Queremos que nuestro equipo gane y muestre buen juego. Pero no siempre se puede tenerlo todo, quién sabe… No siempre los equipos que “mejor juegan” son los que más ganan (Selección Colombia 1990).


Vayamos del a mano de la final en el Maracaná entre Liga de Quito y Fluminense para intentar responder a esta interrogante. La U consiguió su tercer título internacional en una moneda de dos caras totalmente opuestas. En el partido en Casablanca, Liga apabulló a Fluminense con juego, físico, actitud ofensiva y 5 goles, que a la postre hicieron la diferencia.


Ya en Río, los albos no hilaron una jugada digna de resaltar, excepto por la contra en la que Bieler dejó solo a Néicer frente al portero. El ecautoriano debía rematar con potencia, pero al intentar emular a Gica Hagi en un sombrero, su disparo quedó en manos Rafael, arquero del equipo carioca.


La consigna de Fossatti era evidente: destruir el juego de Flu sistemáticamente, esperar atrás e intentar el contragolpe, con el sacrificio de Bieler que debía “tenerla arriba e intentar que le cometieran falta”. Planteamiento tacaño que tuvo dos consecuencias: una copa internacional obtenida con sufrimiento y un mal sabor de boca para los que esperamos que Liga propusiera algo más de fútbol, sin arriesgar a lo Juan Ramón ‘Kamikaze’ Carrasco, claro está. Tener el balón y demostrar toque y buen manejo del cuero es algo que se les da cómodo a jugadores hábiles de Liga, como Méndez, Ulises o Reasco. Entrando en el campo del “fútbol ficción” como lo llama el gran periodista deportivo español Rubén Uría, habría sido menos arriesgado intentar incrementar al posesión en el medio campo y no regalárselo a Conca, Fred y compañía.


En fin, se ganó. Copa es copa y eso nos puso contentos a los hinchas de Liga y a muchos otros ecuatorianos (siempre hay quien hace fuerza por los extranjeros con tal que los enemigos de patio no ganen nada más). Una nueva copa, ganada en un partido de 180 minutos con una primera parte brillante y en una segunda menos que mediocre: el resultado es que se ganó.

¿Ustedes qué opinan? ¿si hay que escoger entre resultados o buen fútbol?

2 comentarios:

  1. jajaja... marujaaaaaaaaaaaaa!! saludos felicitaciones

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  2. A pesar de que se disfrutan los títulos, el fútbol nada tiene que ver finalmente con los resultados, y siendo radicales se los podría pensar a éstos ya como situados en el terreno de lo extrafutbolístico. Así que el problema de jugar bien o ganar es solo un pseudoproblema que no tendría espacio dentro de la propia reflexión el fútbol.
    En definitiva, el propio fútbol es una palabra menor dentro del Fútbol escrito con mayúsculas, pues ocupa un lugar marginal dentro del ámbito del Rey de los deportes y todo su gran espectáculo. Quizá ho hay footballyfutbol, sino fútbol y Fútbol y solo en este último cabe el problema entre jugar bien o ganar. Es el fútbol con minúscula el que interesa, ese que juega la pulga Messi, el piojo Manso o el mago Salas. Lo menor, lo excesivo.

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